El primer abad no ordenado de Estados Unidos elegido para la Abadía de San Anselmo

El abad benedictino Isaac Murphy fue elegido sexto abad de la abadía de San Anselmo en Manchester, New Hampshire, el 17 de junio. Murphy ingresó a la comunidad en la década de 1990.

30 de julio de 2024Compartir en FacebookCompartir en TwitterEnviar por correo electrónico a un amigoImprimir

El abad benedictino Isaac Murphy fue  elegido sexto abad de la abadía de San Anselmo en Manchester, New Hampshire, el 17 de junio. Es el primer abad no ordenado desde que el Papa Francisco  anunció en 2022 que los hermanos laicos pueden dirigir comunidades religiosas de sacerdotes y hermanos con permiso del Vaticano, y el primer abad no ordenado en la historia de los Estados Unidos.

«Estoy feliz y orgulloso de ser el abad», dijo Murphy, quien también será rector del St. Anselm College y presidente de los miembros de la corporación del St. Anselm College. Fue prior, el segundo al mando de la abadía, de 2005 a 2013.

«Hemos encontrado a la persona adecuada que la comunidad necesita. No fue un problema que no estuviera ordenado», dijo el padre benedictino Francis McCarty, que se desempeñó como secretario de elecciones. «La comunidad no está haciendo ningún tipo de declaración al elegir a un hermano; elegimos al hermano Isaac porque sería un buen abad», agregó. La abadía ha tenido durante mucho tiempo hermanos no ordenados en puestos de liderazgo, algo que la convirtió en una comunidad atractiva inicialmente para Murphy cuando ingresó en la década de 1990.

La Abadía de San Anselmo  forma parte de la  Congregación Americano-Cassinese , un grupo de monasterios benedictinos ubicados principalmente en los Estados Unidos. El abad benedictino presidente Jonathan Licari presidió la elección. La intención era comenzar el 29 de abril con un día de nominación de candidatos y oración, y concluir el 30 de abril con la votación. Se consideraron varios candidatos y la comunidad votó por Murphy.

El abad Isaac Murphy aparece en la foto con el abad presidente Jonathan Licari.

En un rescripto de 2022, Francisco  concedió una excepción al derecho canónico. Pero como ser un hermano laico sigue siendo un  impedimento canónico para ser elegido superior de una comunidad con hombres laicos y ordenados, Licari tuvo que suspender la elección. Necesitaba una decisión del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica en Roma, que tardó seis semanas. «Esperar la respuesta de Roma nos generó ansiedad. No sabíamos cuánto tiempo llevaría», dijo Murphy.

Durante este tiempo, Licari nombró al prior benedictino P. Augustine Kelly como administrador temporal. Cuando el Vaticano envió su confirmación, pudo reabrir la elección y confirmar el nombramiento de Murphy.

«Creo que esta es una oportunidad maravillosa para la Congregación Americano-Cassinese y todos los benedictinos, porque abre la puerta a más personas calificadas», dijo Licari.

Murphy cree que la abadía va por buen camino y no tiene previsto realizar grandes cambios ahora que está a cargo. «Estoy muy satisfecho con las prácticas que tenemos», afirmó. La abadía sigue la Regla de San Benito, desarrollada por el monje medieval San Benito, que no estaba ordenado.

Todavía están tratando de decidir cómo manejar liturgias como la Misa de Navidad, que tradicionalmente preside el abad. Una idea es hacer una diferencia entre «presidir» y «celebrar», similar a cómo el Papa Francisco actualmente no celebra la Misa debido a su incapacidad para permanecer de pie durante largos períodos. Murphy señaló que un abad anterior de San Anselmo le pedía al prior que celebrara. También hay otros detalles que resolver, como si puede o no usar una mitra, que está asociada con el episcopado pero que ciertos abades también pueden usar. «Todo es nuevo», dijo Licari.

Una de las cosas que Murphy tiene en mente, como la de todo superior de una casa religiosa estadounidense, es cómo conseguir que más personas quieran ingresar. La abadía ha tenido una  buena década en cuanto a vocaciones. Si bien Murphy reconoce que las vocaciones pueden darse en ciclos, quiere hacer todo lo posible para que el crecimiento continúe.

«No hay ningún secreto. Tienes que vivir una vida auténtica. Quieres que la gente te conozca», afirmó.

El tipo de hombre que esperan atraer es alguien que quiera dedicarse al apostolado de la educación superior católica, que es la labor principal de la abadía. Algunos son profesores del departamento de teología o trabajan en el ministerio del campus, pero otros desempeñan funciones como la dirección del museo de arte del campus o el puesto de coordinadores de cumplimiento de la NCAA.

Como un gran número de monjes son ex alumnos de la universidad, tener una sólida vida católica en el campus también es parte de su estrategia vocacional.

«Tenemos que ser intencionales y tener conversaciones que tengan la misión y la identidad como prioridad. No se trata solo de requisitos curriculares, sino de integrarlos y de tener una misión pastoral, para que los estudiantes puedan prosperar en un entorno católico», dijo Murphy.

McCarty es también  subdirector del ministerio universitario en St. Anselm College, por lo que trabaja directamente con los estudiantes. «Quiero demostrar que vivimos una auténtica vida monástica que es fiel a nuestro fundador, San Benito, y a la vocación monástica dentro de la Iglesia, pero también mostrar a las vocaciones potenciales y a todo el mundo que somos seres humanos», dijo.

«La gente pone al clero y a los religiosos en un pedestal. Soy un ser humano como tú, amo cosas, odio cosas, lucho con cosas. Todos estamos llamados a la santidad, y así es como yo estoy llamado a vivirla», añadió. Es un ex alumno de la universidad y entró cinco años después de graduarse.

McCarty señaló que incluso si un joven no está interesado en ingresar de inmediato, conocer a tantos monjes durante un período formativo de su vida lo mantendrá en su cabeza como una opción. «Cuando conoces a un monje que tiene una edad cercana a la tuya, convertirse en monje parece mucho más posible», dijo. La abadía recibe entre dos y tres hombres al mes que piden más información y unos seis hombres al año que hacen un retiro de discernimiento de fin de semana.

La abadía también dirige  Woodside Priory School , una escuela preparatoria para la universidad en California, que actualmente tiene tres hermanos residentes. Murphy dijo que sabe que la gente desearía que hubiera una mayor presencia monástica en la escuela, pero que esperará para decidir nuevos planes para la escuela hasta después de una próxima visita este otoño.

Murphy, originario de Montreal, Quebec, tiene una licenciatura, una maestría y un doctorado en ciencias políticas y ha sido profesor en el departamento de ciencias políticas de la universidad. «Espero que las primarias de New Hampshire sigan siendo las primeras», dijo; la universidad es sede del  Instituto de Política de New Hampshire , que organiza debates de la campaña presidencial.

Además de ser prior y profesor, fue también vicepresidente de asuntos académicos de la universidad y, más recientemente, vicepresidente ejecutivo. Formó parte del consejo directivo de la universidad desde 2002 hasta 2009 y ha sido miembro del consejo de administración desde 2009 hasta la actualidad.

Murphy también tiene un blog de larga data , donde reseña los libros que la comunidad lee durante las comidas. «Las reseñas de libros tal vez no sean lo que la gente espera del blog de un abad», dijo, pero no está seguro de qué quiere hacer a continuación.

La Abadía de San Anselmo fue fundada en 1889 por monjes de la Abadía de Santa María en Newark, Nueva Jersey. Además del colegio y la escuela, también tienen una parroquia en Manchester, New Hampshire*. Actualmente hay 29 monjes.